Cuando se trata de los logros de comunicación de los niños pequeños, a menudo nos centramos en habilidades como el lenguaje expresivo, el vocabulario o la articulación y, a veces, olvidamos que ser un buen oyente es también una parte esencial de ser un buen comunicador. Pero ser un buen oyente no se trata solamente de ser educado. (¡Aunque nos encantan los modales!, conoce cómo comenzar a enseñar modales, desde la niñez.)
¿Qué es la escucha activa?
Cuando estamos escuchando activamente, no escuchamos simplemente un mensaje. Hacemos un esfuerzo consciente para prestar atención, entender y responder a lo que alguien está diciendo. Es una habilidad muy compleja que le tomará muchos años a tu niño pequeño dominar, pero eventualmente le ayudará a:
- Enfocarse en el mensaje, las emociones y la perspectiva de quien está hablando.
- Demostrar atención a través de la comunicación no verbal, como mantener contacto visual y tener gestos y expresiones faciales apropiadas.
- Ser consciente de cómo sus experiencias, suposiciones u opiniones afectan a la forma en que reciben el mensaje del orador.
- Abstenerse de interrumpir.
Se necesita tiempo y esfuerzo para dominar las habilidades de escucha activa. ¡Por eso es tan importante empezar temprano! De hecho, muchos adultos carecen de habilidades efectivas de escucha activa. Las investigaciones sugieren que solo recordamos entre el 25 y el 50% de lo que dice un orador. Tomarse el tiempo para sentar las bases de las habilidades de escucha activa de tu niño pequeño ahora puede proporcionarle muchos beneficios en el futuro.
¿Por qué la escucha activa es importante?
En un nivel básico, la escucha activa es fundamental para el aprendizaje. Al practicar ahora la escucha activa con tu niño, lo estás preparando para que sea un oyente efectivo en la escuela. Las habilidades de escucha activa también están estrechamente ligadas al seguimiento de instrucciones, la comunicación efectiva, las mejores relaciones, el pensamiento crítico, el liderazgo, la empatía y la inteligencia emocional.
¿Cómo se desarrolla la escucha activa?
Generalmente, las habilidades de escucha activa se desarrollan de la siguiente manera. Ten en cuenta que no todos los niños encajen perfectamente en esta línea de tiempo.
25-27 meses – Puede escuchar activamente por alrededor de 3 a 6 minutos.
28-30 meses – Mejora las habilidades de escucha activa haciendo preguntas durante las conversaciones.
31-33 meses – Puede escuchar activamente entre 6 y 10 minutos.
¿Cómo puedes apoyar las habilidades de escucha activa de tu niño?
Aquí hay algunas formas clave para desarrollar la capacidad de escucha activa de tu pequeño:
Apoyando las habilidades de lenguaje receptivo. El lenguaje receptivo nos permite entender y responder a la información que oímos y vemos. Es una parte central de la escucha activa. En este artículo puedes aprender a cultivar el lenguaje receptivo de tu pequeño.
Leyendo. Cuando le lees a tu niño, él está tomando la información auditiva y visualmente, para analizarla y poder entenderla. Cuando te dedicas a la lectura interactiva, le das un impulso extra a sus habilidades de escucha.
Enfocándose en las habilidades de atención. Se necesita una gran capacidad de atención para escuchar activamente. En este artículo puedes aprender maneras de apoyar el desarrollo de las habilidades de atención de tu niño.
Modelando las habilidades de escucha. Incluso cuando tu niño es muy pequeño, dedicar constantemente tiempo (¡incluso unos pocos minutos al día!) a escucharle activamente es una forma poderosa de ayudarle a convertirse en un oyente activo. Concéntrate completamente en lo que dice, y parafrasea o haz preguntas para demostrar que estás concentrado en la conversación.
Ensaya nuestras actividades de escucha activa de BabySparks. Puedes encontrar formas divertidas de practicar esta habilidad con tu niño pequeño en el área de habla de nuestro programa de desarrollo.
Se necesitará mucho tiempo para que tu niño domine la escucha activa, pero no hay mejor momento que ahora para introducir esta importante habilidad de comunicación.